¿Están organizando un viaje y en la otra pestaña leen noticias sobre la crisis climática? ¿Los comentarios de Greta Thunberg les hicieron ruido y quieren saber cómo reducir su huella de carbono? ¿Desean sentir cómo es viajar con menos peso, menos plástico y más barato? Mientras preparamos la super-guía-cósmica-larguísima de reflexiones sobre viajar de manera más responsable, les dejamos unos rápidos tips de cosas simples que podemos aplicar en cualquier viaje de vacaciones o trabajo para hacerlo más sustentable. No sólo reducirán desechos sino también algunos gastos, además contribuirán a respetar las costumbres locales y apoyar su economía. Preparadas, listos, ya:

Armado de la mochila o valija

Todo empieza por casa, el supermercado y ese crucial momento de armado de la mochila, valija, maleta o lo que decidan usar para llevar sus objetos de viaje. Primero: no empaquen ropa o productos que no usarán. Cargarán demás y finalmente se verán obligadxs a usar las cosas simplemente porque las han llevado, ¿para qué? terminarán lavando ropa apenas usada.

Productos de baño: shampoo sólido, cepillo de dientes, copita menstrual

A la hora de elegir productos de baño recomendamos llevar jabón y shampoo sólido en una jabonera, cajita que ya tengan o una bolsita de tela. En lugar de trasladar los tubos gigantes de plástico estarán ocupando menos espacio en el equipaje y generarán un impacto menor en el medioambiente. El shampoo sólido es un camino de ida, tendrán el cabello precioso durante todas sus vacaciones y luego podrán implementarlo en casa a la vuelta. Todo lo que ya tengan en sus casas puede tener una segunda vida como cajita para el jabón, o trasladar las cremas u otros artículos. Cuanto menos plástico compren, mejor, pero si ya lo tienen pueden reutilizarlo.

Producto sustentables de baño o tocador ideal para viaje: shampoo sólido, cepillo de bambú

Si van a comprar un cepillo de dientes sólo para este viaje, pueden probar con uno de bambú. Una vez que lo tengan, no querrán volver al plástico. Pasados los tres meses, antes de conseguir uno nuevo, lo tiran de manera consciente: se retiran las cerdas y se botan en el contenedor de reciclaje plástico. El mango de bambú se puede compostar, usar para armar un fueguito o incluso de decoración en una maceta escribiendo el nombre de la planta. También se puede usar con fines creativos (sin retirar las cerdas) para pintar; o limpiar, puede ayudar a sacar manchas difíciles. Como último recurso pueden romperlo con un martillo y devolverlo a la tierra. Para las y los haters: el bambú crece como loco (tenemos experiencia intentando controlar su furia) y la planta no se mata para hacer este tipo de cepillos.

El pequeño nécessaire que usamos es un diseño de andypanda

¡No olvidar la copa menstrual! Si estarán menstruando durante el viaje es el momento perfecto para hacer el cambio, la copita reducirá el espacio que dedican en su valija a las toallitas, compresas y tampones. Incluso ahorrarán un dineral ya que sólo se compra una vez cada cinco o diez años (dependiendo el modelo). Nunca más correr en busca de tampones en un país desconocido o en una playa donde todo cuesta el doble.

¿Todavía no saben qué es la copa menstrual?
¡Click aquí para ir al artículo dedicado a la copita! Chin chin.

Útiles para el día a día: bolsita y tupper

Lleven una bolsita reutilizable. Si todavía tienen esas tote bags hermosas que estuvieron de moda y ya no se usan tanto, son perfectas para muchas cosas. Primero, si necesitan envolver objetos adentro de la mochila, ayudan a evitar las bolsas plásticas. Segundo: cuando estén viajando y vayan de compras ya tendrán su bolsita para el supermercado y evitarán aceptar las de plástico.

Si tienen lugar en la mochila pueden llevar un pequeño tupper de vidrio o metal, con algo para picar como frutos secos o fruta. Es ideal tener uno cuando están viajando por si les dan ganas de hacer un picnic, así evitarán comprar sandwiches en el supermercado y ahorrarán todo el packaging innecesario. Lo ideal es llevar uno más grande y adentro uno más pequeño. Adentro del tupper pueden llevar cubiertos que tengan en sus casas, así evitarán los platos, cubiertos y vasos plásticos descartables que les ofrecen al comprar comida callejera, en mercados o en la playa.

Llevar una botella de agua

Más simple, es imposible: usen una botella recargable. Antes de salir a pasear la llenan de agua y listo. No gastarán dinero en el camino y reducirán el consumo de plástico. Desde mapa cósmico usamos y recomendamos llevar un termo de medio litro, ya que además de agua fría nos permite llevar bebidas calientes como té, o agua para mate. Si están en un lugar donde no es recomendable consumir agua de la canilla, y no tienen otra opción, compren un bidón lo más grande posible y rellenen la botella antes de salir de paseo. Comprar una botellita plástica a cada rato es carísimo y aunque en algunos lugares se recicle, es mucho más simple descartar un bidón de cinco litros que veinte botellitas plásticas. Además, de este modo evitamos entrar en modo «descartable», comprando y botando a cada rato. Rellenar nuestra botella nos ayuda a comprometernos con la acción diaria de tomar agua. Simple y muy básico, ¿cierto?

Alojamiento: prestar atención y evitar malos hábitos

Podemos viajar en carpa o ir a hoteles, sea cual sea el viaje que elijamos hacer, no dejamos de tener una gran responsabilidad y por eso les invitamos a evitar malos hábitos. Por supuesto que mucho dependerá del tipo de viaje que quieran realizar, pero en todos los lugares donde nos hospedemos podremos hacer algo para reducir el impacto ambiental y también ahorrar un poco.

Existe todo un nuevo concepto en cuanto a los alojamientos eco-friendly. Desde cabañas autosuficientes hasta camping glamoroso (glamping), y los hoteles más tradicionales también están comenzando a reducir el impacto ambiental -aunque en otra escala-. Recomendamos acampar siempre que se pueda y el viaje sea en la naturaleza, o elegir hospedajes de propietarios locales si el viaje es en pueblos o ciudades.

Acampando en la montaña y el bosque en un viaje por California

Si todavía no se animan al gran salto o siguen eligiendo hospedarse en hoteles hay que ir sabiendo que son muchas las cuestiones que no podemos controlar, ya que otras personas hacen todo por nosotrxs. Pero si este es el tipo de viaje que deseamos hacer aún así hay algunos hábitos que podemos mejorar. Por ejemplo: si tomamos una ducha podemos volver a utilizar la toalla al día siguiente en lugar de dejarla en el suelo para lavar. Sabemos que los hoteles lavan todos los días, pero ¿hace falta que laven esa toalla? Probablemente en sus casas no laven la toalla cada vez que se dan un baño. Entonces si se hospedan en un hotel cuatro o cinco días, su toalla puede ser lavada una vez que dejen el hospedaje. Además pueden evitar utilizar todos los elementos descartables que en general ponen a disposición como pequeñas muestras de shampoo o jabón líquido o cepillos de dientes descartables envueltos en plástico; incluso pueden pedir que no se los dejen en su habitación, para asegurarse de que no irán a la basura sin siquiera haberlos abierto una vez que dejen el alojamiento.

Por otro lado, cuando buscan hospedaje pueden elegir uno eco-responsable o quedarse con gente local. Hay muchas maneras de hacerlo. Los Bed and Breakfast dan una cercanía con los dueños que los hoteles no proponen, muchas veces son los mismos propietarios y propietarias del lugar quienes cocinan, limpian y hasta hacen las remodelaciones del espacio. Seguramente querrán gastar lo menos posible y aprovechar mejor sus recursos y para eso es muy probable que no desperdicien nada. Si les interesa pueden conversar acerca de este tema con sus hosts y enterarse más.

Si están realizando un viaje largo y tienen tiempo y ganas de conocer un poco mejor la cultura local, es muy recomendable realizar una experiencia de voluntariado. De este modo participarán de la economía local y serán parte de un proyecto que seguro recordarán por siempre. Desde mapa cósmico usamos la plataforma workaway, es ideal si viajan de a dos ya que la suscripción anual es más económica. Allí encontrarán muchísima gente que busca personas voluntarias para trabajar unas 4 o 5 horas por día a cambio de alojamiento y comidas. Algunos proyectos aceptan gente por unos días, otros por semanas o incluso meses. Hemos tenido muy buenas experiencias utilizando este sistema y por supuesto es una manera de viajar muy barata.

Otro buen hábito para incorporar al llegar a un nuevo lugar es informarse acerca de las políticas de reciclaje locales. En algunos lugares como Alemania hasta se pueden tirar paquetes sucios, pero en otros no. Lo ideal es producir pocos desechos, pero mientras tengamos papeles o plásticos para tirar, lo más responsable como turistas es saber cómo y dónde hacerlo.

Algo muy importante que se puede poner en práctica tanto en el desayuno del hotel como en cualquier lugar donde nos sirvan un plato de comida es elegir de manera consciente qué y cuánto comeremos. Hemos visto familias enteras llenando sus platos como si no hubiera un mañana, y la verdad es que -si bien no sabemos qué pasará mañana- no es necesario desperdiciar comida de esa manera. No porque esté incluido en el precio hace falta que lo tengamos en el plato si realmente no lo queremos. Basta con preguntar el tamaño de las porciones, o elegir un plato y no dos. A veces los niños y niñas no comen la misma cantidad que la persona que ordena por ellxs y muchas veces una porción para una persona mayor en un plato de una persona de 8 años implica desperdiciar la mitad. Ese alimento irá directamente a la basura. Compartir la comida es una buena solución: les dará más variedad y si se quedan con hambre siempre podrán pedir un poco más.

Transporte sustentable: ¡usa tus piernas!

Cada vez se habla más de la necesidad de reducir la huella de carbono y de no tomar más aviones. Sin embargo hasta marzo de 2020, cuando la pandemia de covid-19 congeló la industria del turismo a nivel mundial, las aerolíneas low-cost estaban ofreciendo precios que muchas veces era casi imposible resistir. Sabemos que el avión es muchas veces inevitable, desde mapa cósmico lo utilizamos para hacer viajes transatlánticos que de otra manera no podríamos hacer por falta de tiempo e incluso dinero. Pero para viajar entre países, ciudades o pueblos que no se encuentran a miles de kilómetros de distancia no es necesario tomar un avión.

Transporte para viajar sustentable: tren

El tren es la mejor manera de moverse ya que es la que menos impacto ambiental genera. Si están por hacer un road-trip, una buena opción es compartir el auto. Levantar gente en el camino nos da la posibilidad de conocer personas y culturas diferentes a la propia. Si les da miedo o sienten inseguridad, pueden usar las aplicaciones que han sido creadas para compartir el transporte y conectar gente que viaja; esto además reducirá los costos. Les contamos más en nuestro artículo para moverse barato por Europa.

Si tienen que hacer un viaje largo y llegan a destino en avión, no duden en tomar transporte público para acercarse a su hospedaje. En muchos lugares es la mejor forma de acceder a las ciudades. Si esto no funciona en su destino, piensen en compartir el transporte privado. ¡No teman al car-pool! De esta manera evitarán taxis carísimos. Investiguen, en muchos lugares podrán llegar a su alojamiento sin gastar un dineral.

La manera que siempre elegimos para movernos es a pie. ¿Qué mejor momento que las vacaciones para disfrutar de paseos y caminatas? Recorrer así los pueblos, las ciudades o la naturaleza es la mejor manera de conocer y explorar los lugares a los que viajamos. Si se quedan varios días en un mismo lugar, alquilar una bicicleta al llegar es una opción fantástica para moverse durante toda su estadía. A veces, los alojamientos ofrecen alquiler de bici o incluso, si se hospedan en departamentos, pueden pedir a sus hosts que les presten unas.

Además, si van a hacer un tour para conocer una ciudad pueden optar por los ya conocidísimos free walking tours, donde pueden pasar dos o tres horas caminando y descubriendo el lugar con los comentarios de las y los guías. Son una opción muchísimo más interesante que los buses turísticos y no generan ningún impacto ambiental. Además, por lo general quienes trabajan en estas empresas son estudiantes o profesionales de historia, arquitectura o arte y se apasionan por el lugar donde viven. Nunca olviden dejar una buena propina, ya que son trabajos que dependen de las mismas (e incluso deben dar una parte importante de esos ingresos a la empresa).

Consumir productos locales y evitar la carne

Mercado en San Francisco: productos frescos, locales, sustentables y barato

¿Sabían que reduciendo su consumo de carne también reducen las emisiones de gases de efecto invernadero? Algunxs piensan oh qué difícil, no consumir productos de origen animal, pero ¿lo han intentado al menos una semana? Viajar a otro lugar es una gran oportunidad para probar cosas nuevas, en un contexto distinto, pueden aprovechar para intentar mantener una dieta diferente. Les proponemos para sus próximas vacaciones no consumir productos de origen animal e intentar comer y beber solamente productos locales. ¿Se animan? Su dieta será incluso más variada y ahorrarán bastante dinero. Dejar de comer carne les asegura un modo de viaje más saludable, barato y amigable con el mundo. Además, recorrer mercados locales es un deporte fantástico, se pondrán en contacto con la gente del lugar, probarán nuevos platos y descubrirán los verdaderos sabores locales. Pueden intentar esta práctica en el lugar donde viven, hacer las compras en pequeños comercios o ferias donde encontrar a pequeños productores. Allí podrán conocer sus historias y saber de dónde vienen los productos con que alimentan su cuerpo.

En nuestra sección gastronomía veggie reflexionamos más sobre este tema y les recomendamos recetas, restaurantes y lugares donde comer cuando están viajando.

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? Mercados y productos locales. ⠀ ? Enloquecemos cuando se trata de probar productos locales, sentimos que es parte de conocer un lugar y su cultura. Si bien no comemos carnes, solemos encontrar muchísimas opciones. Los mercados son ideales para conocer, probar y pedir recomendaciones. Además se encuentran buenos precios. ⠀ ❗️Actualmente estamos trabajando de guías de turismo, nos llama mucho la atención ver cada día turistas consumiendo los mismos productos y alimentos que en sus países. Hemos visto gente desesperada por un Starbucks o Mcdonalds teniendo un café o restaurante bien autóctono al lado. Nos preguntamos si no quieren salir de lo conocido por miedo, comodidad, falta de curiosidad, interés o simple desconocimiento y desconfianza ante lo no-conocido. ⠀ ?? ¿Se ponen a prueba cuando viajan? ¿Les gusta probar cosas nuevas? ¿Les genera curiosidad o miedo? ¿Alguna vez se quedaron con ganas de probar algo? ⠀ ? En el mercado de la foto compramos los quesos más ricos que probamos en la vida. En un pueblo de Montenegro comimos una polenta deliciosa. En Múnich devoramos un currywurst vegetariano de locura. En Jujuy tomamos té de coca, cuando sentíamos que nos explotaba la cabeza (y dio resultado). En Nápoles nos animamos al ragú vegetariano más de una vez, en Akko probamos el mejor hummus del universo y en Fez el tajin más sabroso. ¡La lista sigue y seguirá! ⠀ #mapacosmico #blogdeviajes #amoviajar #recorriendoelmundo #viajaresvivir #momentosunicos #aventuras #viajerosporelmundo #fotodeldia #momentos #mochilerxs #travel #travelphotography #tipsdeviaje #wanderlust #wonderfulplaces #placestovisit #explore #viajarbarato #bestplacestogo #culturetrip #francia #paisvasco #comersano #productoslocales #mercados #comidafrancesa #reflexiones

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Souvenir, souvenir: Evitar las compras innecesarias y el fast shopping

¿Por qué tenemos la costumbre de llevar un recuerdo del viaje propio a otras personas? Tal vez sea porque regalar es un acto hermoso, porque nos da la idea de que hemos recordado a esa persona cuando estábamos lejos. ¿Pero cuántas veces pensamos con detenimiento qué comprar? Cada vez es más simple comprar una remerita en una marca de moda y barata. Es un regalo que puede ser muy bien recibido, porque en algunos lugares como en Buenos Aires, las compras en el exterior son codiciadas, como si faltaran productores locales tendemos a creer que lo de afuera es mejor.

Sin embargo viajando descubrimos varias cosas: primero que no podemos llevar objetos para todo el mundo, porque nos romperíamos la espalda y deberíamos pagar exceso de equipaje. Si queremos viajar barato, esto no entra en la ecuación. Además no siempre los típicos souvenirs son el mejor regalo para todas las personas, y probablemente no colaboren a la economía local ni contribuyan al medioambiente. Hay alternativas, tenemos que poner en marcha la creatividad. Enviar una postal con algunas palabras dedicadas tiene un sentido simbólico que nos encanta, comprar un producto local como un jabón, una artesanía o alguna delicia gastronómica que no se consiga en nuestro país puede ser un regalo ideal.

¿Y si quiero comprar para mí mismx? Si viajamos en grandes ciudades a veces, por necesidad, curiosidad o simple inercia entramos a un H&M y todo nos resulta ridículamente barato (y, por supuesto, a la moda). Cinco remeras, tres pantalones, dos sweaters, un par de guantes, una malla para el verano y un par de aros para regalar puede costar lo mismo que un par de libros. Sin embargo es muy probable que no necesitemos toda esa ropa y accesorios que terminemos comprando, una vez más, por inercia y que probablemente regalemos, botemos, o directamente no usemos una o dos temporadas después por la mala calidad de la tela y costuras. Entonces, ¿por qué no repensar nuestra manera de consumir y cambiar algunos hábitos? Las tiendas de ropa vintage están muy de moda y son una excelente manera de reciclar vestimenta. Por lo general se encuentran muy buenas prendas y baratas. En Europa está repleto de este tipo de locales y en muchas se vende un precio fijo por kilo.

Por otro lado comprar a emprendedorxs locales es un hábito que pueden incorporar luego de sus vacaciones. En Buenos Aires nos encanta la feria Juntas, que reúne pequeños emprendimientos de todo tipo: ropa, joyas, artesanías, productos para el bienestar personal, gastronomía, etc. También la feria Sabe la tierra es una buena opción para pasar un fin de semana entre productores locales. En Internet encontrarán muchísima gente que se dedica a producir de manera artesanal o a pequeña escala y por lo general los productos son mucho mejores que los que encontramos en las grandes cadenas, sólo hay que animarse a salir de lo establecido.

La rueda de la fortuna sustentable

Si te parece una gran idea pero todavía no estás preparada o preparado para un cambio tan grande te proponemos hacer girar la rueda y que la fortuna, el azar, o Internet decidan por vos cuál de todos estos hábitos vas a cambiar en su próximo viaje:

¡Sigamos en contacto!

¿Creen que podrán aplicar alguna de estas recomendaciones? ¿Tienen otras? ¡Nos seguimos leyendo en comentarios y en Instagram!

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? Cada mañana nos levantamos y tomamos decisiones. ⠀ ?En general no pensamos demasiado en esto, porque cada cosa que hacemos parece dada. Como si la sociedad ya hubiera decidido por nosotrxs qué cepillo de dientes usar, qué leche tomar, qué productos elegir en el supermercado y en qué medio de transporte ir a trabajar. Pero las decisiones las tomamos todo el tiempo, aunque no lo pensemos. ⠀ ✈️ Cada vez que sacamos un pasaje, por ejemplo, miramos el precio o los tipos de comodidades que ofrece la empresa. Cuando reservamos un alojamiento también pensamos en algunas cosas y no en otras. Por lo general no nos ponemos a pensar si es más sustentable tomar un tren o un bus, o si es mejor elegir un hotel sustentable o una cadena. Así sucede con la ropa, a veces compramos más de la necesaria, descartándola al poco tiempo por su mala calidad. Si no separamos la basura, generamos desechos que podríamos evitar con una acción bastante pequeña. ⠀ ?? El desafío de empezar a viajar (y vivir) sustentable es prestar atención a las decisiones que tomamos, y cuando una nos llama la atención, intentar modificarla. ¿Se animan? ⠀ ? Imagen: Aunque ya no estemos en Bayonne, somos socixs de Atelier @txirrindola , una asociación vasca que se dedica a recuperar bicicletas abandonadas y hacerlas accesibles al público a bajo costo. Además, llevando tu bici cuando tenés algún problema, podés aprender a ser tu propio mecánicx. Gracias a las hermosas bicis que allí conseguimos estuvimos un verano entero recorriendo Bayonne y las playas de Anglet moviéndonos solo a pedal. ⠀ #mapacosmico #blogdeviajes #amoviajar #recorriendoelmundo #aventuras #viajerosporelmundo #bicicleta #mochilerxs #travelphotography #tipsdeviaje #sustentable #desechos #reciclajecreativo #reflexiones #viajes #viajarenbici #desafio #sostenibilidad

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